venres, 1 de febreiro de 2019

Trail del Meridiano: Calor Herreño ( La previa)

Estareis cansados de escucharme decir que las Carreras, nuestros trails, son como la vida, a diferencia de una Marathon que tiene que ser algo parecido a lo que pasa por tu cabeza momentos antes de la muerte, son tantos los estados, las sensaciones, lo que te ocurre durante esos cuarenta y dos mil trescientos metros que no encuentro otra similitud mejor. Pero, como siempre, me estoy adelantado.
Este sueño, para mí, comenzó en Septiembre en la Xtreme Lagos de Covadonga. Los últimos veinte quilómetros de aquella Carrera los pase junto a un Herreño, de nombre Julio, y ya durante aquella peregrinación a la meta me hablo de ti. La maratón del Meridiano, reconozco que era la primera vez que la oia, pero en mi, un recién llegado a este mundo, es de los más normal. Él sueño de ir, poco a poco fue convirtiéndose en realidad, y hasta hoy.
Tenía que coger un avión a tenerife, de allí un autobús a la parte norte y nuevamente otro avión que me llevará a Él Hierro, pero antes tuve el placer de conocer La Laguna, su curioso centro, su ambiente anclado en otro tiempo. Me encantó ese paseo bajo la lluvia.
Reconozco que me gusta la soledad en pequeñas dosis, muchas veces solo con nosotros mismos somos capaces de salir de situaciones difíciles. No son fechas fáciles para mí. Él día de la Carrera se cumplirá un año exacto desde que mi vida cambio y estos días parece que todo vuelve a estar más latente que nunca. El dolor, la frustración, incluso la ira, nunca borran de todo un sentimiento tan grande. Pero la vida sigue, aunque no lo creas, el tiempo sigue corriendo, y las personas, aunque para ti parezca algo imposible, siguen haciendo su vida.
En todo eso pensaba mientras mi querido orballo no dejaba de mojarme.

Jueves 31

Un viaje de apenas media horita y ya estabamos en El Hierro. Allí viene a buscarme ni más ni menos que Gilberto el concejal de cultura. Me va contando la situacion de Julio, esta en el hospital, y aunque no será nada pinta que se va a perder la fiesta de este fin de semana. Me duele en el alma. A veces te encuentras personas buenas en la vida que se lo merecen todo y Julio es una de ellas. Té quedan mil Carreras amigo, y algunas las compartiremos, pero te echare mucho de menos.
Claro que para no hacerlo lo dejaste todo muy preparado. Gilberto me va contando como es la Carrera, dándome detalles de esos únicos, no para alguien que quiere ganar, sino para alguien que quiere disfrutar, como yo. Me enseña el refugio que será mi hogar estos días, curiosamente sede del PSOE, y me entra la risa. Hospitalidad con mayusculas. Gilberto me da una buena ruta por él pueblo y acabo en la casa Abajo, un bar tienda de todo que atiende la Vero, no pasan cinco minutos y ya quedamos para comer. El valor de las personas, abrir la mente y dejarte llevar hace que conozcas seres únicos, Vero Al igual que Gilberto son una placer para los sentidos. Subo con ella y otro chico Al km vertical, al llegar me topo a Depa que solo le falto cantar el miñaterragalega. Zaid grabando videos partiendose, conozco tantos herreños que me es imposible acordarme, pero todos saben del amigo gallego de Julio. Gilberto me sube a la meta en Jinama y aquello es increíble, bestial, las vistas una vez disipada la niebla me ciegan de hermosura. No tengo palabras. Y la competición, 4 kms con 1000 m de desnivel positivo. Acojonante. Verlos subir y aplaudir a rabiar, que titanes, solo atreverse me parece bestial. Él año que viene si vengo lo haré.
Pero el día no acaba aquí, bajamos de nuevo a la Frontera y nos espera la charla de un luchador, una persona que superando dos cánceres se agarro a la montaña para sobrevivir. Se llama Juan Dual, cuando empezó a enumerar los órganos que le faltan perdi la cuenta, pero como tantos otros ante las adversidades se agarro al deporte para sobrevivir y poco a poco, luchando, hizo cosas que muchos ni soñariamos. Su ejemplo y su corto "vacío" son para poner en colegios, charlas, y recapacitar.
Así, entre charla y cervezas terminó mi primer día en la isla. Baje aquella calle, casi a la una de la mañana, con una sonrisa de oreja a oreja.

Viernes 1

Él viernes teníamos Carreras infantiles, entrega de dorsales y cena de la pasta. Pero el día dio también para mucho. Gilberto me llamo, me dio las llaves de su coche y me dijo, puedes ir a buscar a Julio al aeropuerto? Tenia el alta y estaría en la gran fiesta del meridiano. Antes me dio tiempo a cortarme el pelo y encontrarme a Silvia Puigarnau, habíamos hablado por redes sociales, pero al verla en persona me di cuenta que tenía algo especial. Recogi a Julio y a la vuelta llegamos a tiempo de charlar con ellos, con Zaid siempre bromista, el resto de favoritos y Silvia. Me cautivo su personalidad, su fuerza y de lo poco que hablamos, me quedo esa sensacion de ganas de charlar  con tranquilidad de esto que nos une, mucho que decir dentro y fuera, estoy seguro. Quedamos en vernos más tarde para asi compartir ideas e inaugurar con ella un apartado nuevo en el blog, pero Al menos hoy fue imposible.
Las horas que pase en la casa abajo son incontables, y allí estaba Depa y recordamos ribeira Sacra y el maravilloso carácter Herreño que hay que vivirlo. De allí a comer el Pasticho con Vero y Saray maravillosas anfitrionas. Por la tarde recogida de dorsal con un ambiente increíble, la plaza abarrotada de gente, allí coincidi con Julio, con Juan Dual, y muchos más..así rodeado de amigos hasta la cena de la pasta. Despliegue de medios, personas, esfuerzo, una carpa gigante para dar de comer a casi 1500 corredores. Tremendo.
Y ya ese ansia, eso que nos quema por dentro corredores, que no sabes si es nervio o que es empezó a acecharme lentamente, y así, feliz, sin miedo, soñando con disfrutar mañana me fui a mi casa Herreña, dejandolo todo preparado para ese gran reto de mañana, aunque eso, amigos, eso si que será otra historia.....

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